Cada vino se hace con uvas seleccionadas de un cuartel y suelo específico de nuestros viñedos en pie franco de El Chequén, entregando sentido de origen y un sello distintivo. Bajas producciones de no más de 8 mil kilos por hectárea. Su guarda es entre 8 a 12 meses en fudres de roble francés y cubas ovoides de concreto. Son vinos de producción limitada, de no más de 30.000 botellas cada uno.